Mostrando entradas con la etiqueta Cuenca. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Cuenca. Mostrar todas las entradas

miércoles, 25 de enero de 2023

Parador de Cuenca

 


   La ciudad de Cuenca es Patrimonio de la Humanidad de la Unesco, y en ella se sitúa uno de los Paradores más visitados y demandados de la Red.

   Está ubicado frente a las Casas Colgadas, en el antiguo Convento de San Pablo del siglo XVI de la Orden de los Dominicos.



   Juan del Pozo y Pino, canónigo de la catedral fue el fundador de dicho convento y él mismo costeó la construcción de un puente para unir el monasterio a la ciudad.

   Inicialmente el Puente de San Pablo era de piedra, pero al hundirse uno de sus arcos se sustituyó por uno de metal.



   En un entorno privilegiado, la estampa del puente, el Parador, la Hoz del Huécar y la ciudad es imponente.

   Desde el emblemático edificio del Parador se puede observar el casco antiguo de Cuenca y las escarpadas paredes que forman el río.












   Entrando al Parador su bonito claustro acristalado nos da la bienvenida. Su cafetería está en la antigua capilla, y en lo que fue el refectorio está su restaurante que conserva un bonito artesonado.







   También tiene una piscina de temporada que a pesar de haber estado varias veces alojados no hemos disfrutado ya que siempre hemos ido en invierno, la última vez unos días durante las pasadas Navidades, por cierto estaba precioso adornado para estas fechas tan especiales.





   Su amabilísimo personal nos proporcionará toda la información necesaria sobre Cuenca y lo que se puede ver en esta singular ciudad.





                                                                                                                                        Inma

martes, 21 de junio de 2022

La ciudad romana de Valeria, Cuenca.

 


   El pretor Valerio Flaco fundó hacía el año 90 a. C. la ciudad de Valeria entre las hoces de los ríos Gritos y Zahorra.

   En la época de Augusto experimentó un gran crecimiento y formaba parte de las ciudades del Imperio, en ella se instalaron familias influyentes de Hispania al servicio directo de Roma.

   En los restos del yacimiento se interpretan las diferentes construcciones que había en la metrópoli.



   El Foro era una gran plaza rodeada de edificios que formaban el centro político, entre los que estaban el senado municipal y el archivo.

   Para el abastecimiento de agua a la villa y para las termas se construyeron  varios aljibes. Bajo la plaza del Foro se sitúan cuatro cisternas muy bien conservadas.



   La basílica era una zona porticada para que los mercaderes se protegieran de la lluvia y el sol. Tenía una gran nave central decorada con mármol, esculturas e inscripciones, y una cabeza de Marte en bronce que se conserva en el Museo de Cuenca.

   También había un templo  para el culto al emperador y otros santuarios dedicados a dioses locales. El Ninfeo era una fuente monumental ofrecida a las Ninfas, divinidades del agua.



   Las casas estaban dispuestas en terrazas por todo el espacio de la ciudad, normalmente cada vivienda tenía acceso desde dos calles distintas, tenían un piso bajo con cuadras y cocina y otro alto con los dormitorios.  La parte más distinguida era la cercana al Foro. También había modelos de "domus romana" más tradicionales, en las que las habitaciones se distribuían en torno a un patio central porticado.



   A  la Casa de Valentín se le puso este nombre por un pequeño altar encontrado en ella que ponía "Valentinus Minervae". Se construyó con piedras y barro,  con muros de adobe en el interior y suelo de ladrillos. En ella se encontraron cuernos de venado clavados en la pared, el  grano de trigo preparado para moler, una chimenea en la cocina y una fresquera bajo el suelo.

   Al borde de la ladera está la Casa Colgada, construida en el siglo I d.C.,  semejante a las casas conquenses. Está totalmente adaptada al terreno y parte de su estructura se encuentra volada en el espacio mirando a la Hoz del río Zahorra.



   En lo alto queda un lienzo de muralla de lo que fue un castillo. El conjunto medieval de Valeria fue un lugar estratégico en la zona fronteriza de la línea del Júcar.



                                                                                                                                        Inma




                                                                                                                                               

jueves, 9 de marzo de 2017

Parador de Alarcón "Marqués de Villena"



   El nombre de Alarcón proviene del rey visigodo Alarico. En esta localidad se encuentra uno de los Paradores más bonitos de la Red, tanto por su emplazamiento como por el castillo que ocupa.

   En 1184, Alfonso VIII inició un duro asedio a esta fortaleza, y tras nueve meses fue conquistado gracias a las tropas capitaneadas por Hernán Martínez de Ceballos. Él mismo escaló la muralla apoyándose sobre dos dagas vizcaínas, un arma blanca corta que se usaba en la mano izquierda a la vez que en la derecha se utilizaba la espada. Tras esta hazaña, Hernán cambió su apellido por Martínez de Alarcón.

jueves, 14 de julio de 2016

Monasterio de Uclés "El Escorial de la Mancha"



El Escorial de la Mancha, sobrenombre popular con el que se conoce al Monasterio de Uclés, es una de las obras de mayor tamaño del plateresco español. Fue levantado entre los siglos XVI y XVIII junto al castillo de Albarllana, la otra obra significativa que posee la villa.

jueves, 16 de junio de 2016

Belmonte, un castillo de película

Es Belmonte tierra que inspiró los primeros versos de Fray Luis de León, uno de los hijos más brillantes de este pueblo y quizás también, fue la serena belleza de este paraje manchego la que sedujo a Cervantes a situar aquí el encuentro entre los Caballeros del Bosque y el de la Triste Figura, en su obra más universal. Pero ante todo, Belmonte ha sido cuna de ilustres hijos como el marqués de Villena, natural de esta villa quien, a mediados del siglo XV, ordenó la construcción del castillo y amuralló el pueblo dotándolo de importantes privilegios.



viernes, 20 de marzo de 2015

El nacimiento del Río Cuervo


Nos acercamos a uno de los rincones más hermosos y visitados de la provincia de Cuenca. Declarado Monumento Natural y formando parte de la Serranía de Cuenca, el nacimiento del río Cuervo es un lugar único con preciosas cascadas, manantiales y pozas de agua cristalina.


Al contemplar las cascadas con sus paredes de piedra tapizadas de musgo y sus caprichosas formas, uno percibe una especie de magia flotando en el ambiente, un paraje de una belleza inusitada que la acción del agua ha ido modelando con el paso del tiempo. Una de las instantáneas más fotografiadas de Castilla la Mancha y uno de esos paisajes que conocen incluso quienes no lo han visto nunca.



El río Cuervo nace en un entorno natural que se encuentra escondido en un paraje de ensueño, aunque enseguida notaremos la acción humana; amplio aparcamiento, restaurantes, un área para acampar y hasta un merendero que seguro hará las delicias para los amantes de la tortilla y el filete empanado. Tras dejar atrás el área recreativa, un sendero sigue el curso del río aguas arriba, en un agradable sendero semicircular que en muchos de los tramos está habilitado para todos los públicos.


Estamos en un terreno donde la abundancia de pinares es generosa y el sonido del agua lo inunda todo que, en su incesante fluir entre musgos siempre verdes, configura un salto de agua que aún siendo discreto es a la vez inmenso transformándose en cientos de chorreras provocando una imagen espectacular.


El entorno es de una exuberante vegetación, un buen lugar para aspirar el aire frío y limpio de una mañana invernal aunque esto dependerá de los gustos de cada uno. Lo más recomendable es visitarlo en primavera cuando el río está en todo su esplendor pero estoy seguro que cualquier otra estación tampoco dejará indiferente a nadie. En otoño seguro que impresionará por su colorido y en invierno el agua llega incluso a congelarse, resultando todo un espectáculo.


Tras perder un buen rato en su contemplación y realizar las típicas fotos de recuerdo, si lo que queremos es ver el nacimiento del río, bordearemos las cascadas y ascenderemos un poco más arriba hasta llegar a una pequeña gruta donde el agua surge a borbotones, es ahí donde nace el río Cuervo.


En definitiva, un sitio de gran belleza.


                                                                                                                                                           Rafa

jueves, 31 de julio de 2014

Parque Cinegético de "El Hosquillo".

En la provincia de Cuenca, muy próximo a su capital y en plena serranía alta, encontramos "El Hosquillo", un enclave de inimitable belleza con bosques interminables, cárcavas y hoces por donde discurren las aguas del río Escabas y el arroyo de las truchas. Este paraje tan singular fue el escenario elegido para realizar el primer documental de la serie El hombre y la Tierra de Félix Rodríguez de la Fuente. Hoy "El Hosquillo" es un Parque Cinegético cuyo cometido prioritario es la repoblación de cotos de caza y Parques Nacionales de especies como ciervos, gamos y muflones.

 Río Escabas a su paso por El Hosquillo

Centro de Interpretación y un museo de trofeos

No es fácil llegar al Hosquillo debido a la orografía del terreno, con carreteras sinuosas que hacen difícil su acceso, además hay que reservar con mucho tiempo de antelación, pues tan sólo 50 personas al día y sólo durante los fines de semana pueden recorren el interior del parque. La visita se realiza en vehículos particulares y a la hora concertada donde recorreremos estrechas carreteras hasta llegar a las inmediaciones del Centro de Interpretación y un museo de trofeos de caza donde nos esperan los guías.

Interior del museo de trofeos

donde se exhiben diferentes especie de animales


Sinceramente este espacio fue el que menos me gustó, la colección de animales disecados es impresionante. En él encontré especies protegidas o en peligro de extinción como osos pardos, lobos y linces ibéricos, además de cabra montés, ciervos, gamos, tejones... Nos cuentan que este museo se creó para la concienciación ecológica actual.



Continuamos la visita de una hora aproximadamente, haciendo un recorrido a pie donde nos van contando la historia de este parque. El Hosquillo nos dicen que es un lugar muy especial que se convirtió en un Parque Cinegético allá por los años 60. Su nombre proviene de su orografía hosca y de difícil acceso, cerrado de forma natural por enormes farallones rocosos y con enormes vallas impidiendo la salida a los animales que allí se criaban.



Llegué al Hosquillo con la idea de encontrar muchos más animales de los que realmente vi y por mucho que se empeñaron los guías en contarnos de que en esta Reserva Cinegética campan a sus anchas en estado de semi-libertad cientos de jabalíes, ciervos, corzos o cabra montés además de distintas rapaces y aves forestales, no conseguí ver ninguno de ellos en grandes cantidades, quizás tuvimos algo de mala suerte.


Así que no pude ver ni las águilas reales, águilas perdiceras ni halcones peregrinos que pueblan el precioso valle que conforma el Hosquillo. Tan solo algunos buitres, una cierva que andaba entre los visitantes, algún que otro jabalí, una pareja de lobos ibéricos a lo lejos y dos osos pardos que se acercaban a los barrotes de la verja que separa su área de campeo con la de los visitantes que les hacíamos fotos sin cesar, es un poco triste.



Terminada la visita, marchamos, pues, con nuestros coches por entre los inmensos pinares, entre los que aparecían de vez en cuando algún ciervo que, posiblemente, en el futuro pasaría a engrosar las filas de un Coto de Caza. Para terminar he de decir que lo que más me gustó de esta visita fue el paisaje y para todos aquellos que no lo conozcan, el Hosquillo no es un zoológico, se trata de un parque natural de gran valor ecológico situado en la Serranía alta de Cuenca, cerrado por paredes calizas de una forma totalmente natural donde habitan numerosas especies de animales que dependiendo el día, la hora o la suerte que tengamos, podremos ver o no.

                                                                                                                                                            Rafa

lunes, 16 de septiembre de 2013

La fortaleza de Alarcón

A medio camino entre Madrid - Valencia, por la carretera nacional se encuentra la localidad conquense de Alarcón y su imponente fortaleza, el Castillo de los Marqueses de Villena, en la actualidad Parador de Turismo, uno de los más pequeños de la red pero con todo el encanto que le aporta su privilegiada ubicación en un auténtico castillo del siglo VIII fundado por los musulmanes. 

Vista del Castillo y el acceso a Alarcón

martes, 19 de junio de 2012

Cuenca, ciudad entre dos hoces.


En Cuenca todo es arte, historia, monumentos y naturaleza. Cualquier rincón merece ser fotografiado en cualquier época del año y a cualquier hora del día.

Cuenca

Bañada por los ríos Júcar y Huécar, su encanto reside además de su espectacular entorno en el entramado de callejuelas y rincones de gran belleza que le han permitido ser declarada Patrimonio de la Humanidad. Un paisaje de equilibrio y vértigo. Un nido de águilas como la denominó Pío Baroja.
El origen de Cuenca es bastante incierto pero como en tantas ciudades españolas fueron los musulmanes quienes escogieron el lugar construyendo una fortaleza en un emplazamiento inexpugnable, pensando más en la defensa que en la comodidad de sus habitantes. Fue una de las ciudades españolas que más tiempo estuvo habitada por los árabes. Es Alfonso VIII quien la reconquista y la devuelve a la cristiandad. 
Para iniciar la visita te recomiendo simplemente callejear y perderte por sus pintorescas y empinadas calles empedradas.

Casas colgadas de Cuenca

Sus famosas casas colgadas se convierten en un anticipo de lo mucho de interés que hay en esta ciudad. Su uso ha variado a lo largo del tiempo ajustándose a las diferentes modas y necesidades del momento. Originalmente utilizadas como viviendas particulares, en la actualidad albergan el renombrado Museo de Arte Abstracto y un restaurante.
La Plaza Mayor es el centro del casco antiguo, escenario de las principales fiestas de la ciudad con bellas fachadas coloristas. La majestuosa Catedral inacabada de estilo gótico anglonormando con sus peculiares cristaleras, única en España en este estilo. Fundada por Leonor de Plantagenet, esposa de Alfonso VIII. Sobresale también el Ayuntamiento con su fachada barroca. Muy cerca se encuentra la Torre de Mangana de estilo neomudéjar que formaba parte de la antigua muralla y es la primitiva atalaya del alcázar musulmán.
Adentrándonos en el laberinto de callejuelas es fácil irse encontrando con sorpresas a cada paso que le conceden un especial encanto y te transportan a tiempos pasados. Calles con: recoletas plazas, escalinatas, casonas con portadas, escudos nobiliarios y, sobre todo iglesias y conventos. Algunos de los cuales hoy albergan escuela de arte, hoteles o museos como el de la Ciencia.

Catedral de Cuenca

Otra de las peculiaridades de esta ciudad son sus famosos rascacielos o rascasuelos como los llaman por aquí. Casas que no solo crecen hacia arriba si no que también se prolongan hacia abajo, aferrándose a la roca de la hoz alcanzando hasta los doce pisos.
En el punto más alto de la ciudad se encuentra el barrio del Castillo donde apenas quedan restos de un torreón, parte de la muralla árabe y el arco de Bezudo.
La base de la gastronomía conquense la comprenden platos tan contundentes como: el morteruelo, el ajoarriero o el típico gazpacho manchego. También postres como: el alajú, una especie de torta dulce hecha con miel, almendras y cascara de naranja rallada. La bebida típica es el resoli, compuesta de café, canela, corteza de naranja y azúcar.
Las mejores vistas de la ciudad y de sus casas colgadas las tendrás desde el lado opuesto al barranco, cruzando la mole de hierro del Puente de San Pablo que salva la Hoz del Huécar y que nos conduce directamente al Parador. ¡Desde aquí el espectáculo es impresionante!

Parador de Cuenca 

El Parador se encuentra asentado sobre una gran roca, ocupando el antiguo Convento de San Pablo. La primera impresión que transmite es de paz y tranquilidad. Un enclave privilegiado, rodeado de masas boscosas de pinos en contraste con las caprichosas formaciones rocosas. En su origen fue solo una iglesia después se añadieron diversos edificios que constituyen un bello exponente de la arquitectura religiosa del siglo XVI. La antigua iglesia alberga una exposición permanente del artista conquense Gustavo Torner, una bella conjunción entre un artista del presente y un templo del pasado.

Parador de Cuenca
Interior del Parador


Fueron los Dominicos quien lo habitaron y hoy cualquiera puede disfrutar de su hospedaje. El edificio ha sido ejemplarmente rehabilitado, recorriendo las estancias de este antiguo convento se percibe el ambiente de los siglos pasados. La antigua capilla es hoy una agradable cafetería y el refectorio donde antaño reponían fuerzas los frailes, es el restaurante. Las habitaciones son muy confortables y espaciosas desde muchas de ellas se pueden contemplar unas vistas inolvidables de la ciudad.

Cuando el sol se despide de Cuenca, las luces iluminan el puente y las casas colgadas
Pero Cuenca no es solo la capital cuenta con parajes naturales espectaculares como el Nacimiento del Río Cuervo, Las Torcas, El Ventano del Diablo o la Ciudad Encantada que son parada obligada que bien merecen una visita.



Rafa


viernes, 27 de enero de 2012

El Teatro Romano


Es por todos conocido que el Imperio Romano dejó un huella imborrable en la Península Ibérica, prueba de ello son las numerosas muestras de su arquitectura que han llegado hasta nuestros días (el acueducto de Segovia, el teatro y el anfiteatro de Mérida, las termas y el teatro de Zaragoza, el arco de Medinaceli o la muralla de Zamora) pero más importante aún ha sido su contribución social y sobre todo artística. 

Además de los citados monumentos arquitectónicos, el arte romano del teatro, heredado a su vez de los griegos, fue ampliamente desarrollado en la época de mayor esplendor del imperio. Las representaciones teatrales eran un acontecimiento extraordinario en la vida de las gentes que vivían en las provincias de Roma. Uno de los mayores autores romanos que destacó por sus comedias fue Plauto.

Plauto consagró gran parte de su vida al teatro, en concreto a la comedia, primero adaptando obras de los griegos aunque después escribió grandes obras llenas de humor y equívocos que hacían las delicias de los asistentes como Anfitrión o Aulularia (más conocida como la Comedia de la Olla).

En mi etapa estudiantil tuve la suerte de contar con dos grandes profesores de letras en el instituto que se preocuparon mucho de enseñarnos algo más que a declinar y traducir largos textos del griego o del latín al castellano. En aquella época tuve el privilegio de asistir 2 años consecutivos a varias representaciones teatrales clásicas en la ciudad romana de Segóbriga (Saelices, Cuenca) interpretadas por grupos universitarios de teatro españoles y europeos.



Así pues fue cómo, tras leer las comedias de Plauto durante el curso, pude tener la satisfacción de verlas representadas en un auténtico escenario romano, el teatro romano de Segóbriga, con una puesta en escena de lo más original y por supuesto, ya en castellano. 

Sobre Segóbriga, tengo que añadir que la visita a sus restos (aunque sea sin representación teatral de por medio) es más que recomendable ya que la villa ocupa gran parte del cerro en el que se asienta y conserva en bastante buen estado muchas de sus principales edificaciones (teatro, anfiteatro, las termas, parte de su muralla y el trazado de su foro). La ciudad fue celtíbera antes que romana y hacia el río Cigüela podemos ver los restos de una necrópolis anterior al asentamiento romano. El yacimiento cuenta además con un centro de interpretación/museo muy educativo donde de encuentran los restos de enseres hallados durante las excavaciones (vasijas, monedas, aperos agrícolas, joyas...).       http://www.segobrigavirtual.es/

El Festival Juvenil Europeo de Teatro Grecolatino de Segóbriga se lleva a cabo normalmente en primavera, hacia el mes de mayo, con gran afluencia de público estudiantil y suele estar muy animado. Es aconsejable hacer coincidir la visita con estas fechas para aprovechar y poder asistir a alguna de las representaciones teatrales en este lugar histórico.
Para completar la visita a este enclave manchego, podéis acercaros al Monasterio de Uclés, también conocido como el Escorial de la Mancha, situado a muy pocos kilómetros de aquí. Para los aficionados al cine español, sólo comentaros que varias escenas de la película Alatriste fueron rodadas en este edificio que destaca por la sobriedad de sus líneas y sus imponentes dimensiones que lo hacen visible incluso desde la autovía de Valencia. El monasterio, de estilo barroco, se puede visitar libremente así como la localidad de Uclés que cuenta con una bonita plaza empedrada, algunas casonas blasonadas y un arco de entrada justo enfrente de la Fuente de los Cinco Caños.

Ya sabéis que además del Festival de Teatro de Mérida tenéis otra cita a la que asistir en Segóbriga.
El teatro clásico como la arquitectura es otro tipo de arte que debemos preservar como legado de nuestros antepasados.
"