sábado, 20 de abril de 2019

La joya de Eslovenia, el lago Bled



Eslovenia es un lugar en el que descubrir hermosos paisajes, interesantes poblaciones y preciosos lagos, como el de Bled, considerado por muchos, uno de los más bellos y románticos de Europa.



Lo primero que llama la atención de este idílico escenario es la pequeña isla con una iglesia en el centro. Enseguida te das cuenta de que el lago Bled es un lugar de postal. Un castillo colgando de una pared vertical de más de 100 metros, frondosos bosques rodeando el lago y los picos de los Alpes Julianos de fondo.



Para llegar a la isla, se pueden alquilar barcas con las que puedes remar tú mismo hasta allí o coger una Pletna, pequeñas embarcaciones de fondo plano semejantes a las góndolas. La historia de estos botes, se remonta a finales del siglo XVI desde entonces, la profesión de remero ha sido transmitida de generación en generación. Un trayecto cómodo, romántico y pintoresco.



La embarcación te deja en una elegante escalinata con 99 escalones que habrá que subir para llegar hasta la Iglesia de la Asunción. Multitud de parejas desean celebrar su boda en este lugar y no es de extrañar. Según la tradición, si el novio es capaz de llevar en brazos a la novia hasta el altar subiendo la escalinata, el matrimonio será feliz el resto de vida. Además dentro de la iglesia, una gruesa cuerda permite hacer sonar la campana de los deseos. Hacerla sonar tres veces se cumplirá el deseo pedido.




El lago Bled es de origen glaciar y un lugar encantador. Realmente no sabes a dónde mirar, cada rincón donde se mire tiene mucho encanto. Además de la pequeña iglesia construida en el siglo XV, en la isla hay un restaurante y una tienda de recuerdos. Aunque lo mejor es poder disfrutar de las magníficas vistas de tan extraordinario entorno.





A principios del siglo XX gran parte de la aristocracia europea se sentían atraída por este lago debido a los balnearios que hay en los alrededores y a ese ambiente de tranquilidad que produce. Aunque la principal belleza de este lugar es el lago y las montañas que lo circunda, si realmente queréis observar la grandeza del lago Bled, habrá que subir hasta el castillo. No os arrepentiréis de las vistas desde allá arriba.


El castillo se asoma al lago desde un acantilado de más de 120 metros de altura y da la impresión de ser una fortaleza inexpugnable. Aunque se puede subir perfectamente desde el pueblo andando o en coche y esta adaptado al turismo.



En el interior se puede recorrer sus torreones, sentarse en el patio de armas y tomar algo en su cafetería o en su restaurante. Visitar un museo con objetos medievales o sin duda alguna, la mejor opción, deleitarse con las increíbles vistas del lago Bled asomados a sus terrazas.




La ubicación del castillo es impactante y el lago, uno de los lugares de cuento de hadas más perfectos que recuerdo y una de las cosas que más me han gustado de Eslovenia.


                                                                                                                                                           Loli

2 comentarios :

  1. Dan ganas de ir...precioso comentario....me apunto el lugar, aunque lo de que mi marido me suba en brazos los 100 escalones.....se lo perdonare sino adios a la noche de bodas.

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    1. Eslovenia tiene una gran cantidad de rincones preciosos para visitar y sin duda el lago Bled es un lugar maravilloso. No te preocupes por los escalones, según la tradición si haces sonar la campana de la iglesia tres veces, el deseo se cumplirá.
      ¡Gracias por tu comentario!

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