jueves, 15 de noviembre de 2012

Érase una vez... en Cáceres

En una tierra no muy lejana habitada por nobles, caballeros y princesas hace mucho, mucho tiempo los señores más notables del lugar marcharon a probar fortuna a lejanas tierras allende los mares.
Cuando regresaron años después llenos de tesoros, oro, plata y piedras preciosas decidieron construir los más hermosos y ostentosos palacios en su tierra adornados con ricos blasones familiares que competían en hermosura con los de sus vecinos y en altura con las iglesias más prominentes del lugar.
Así surgió la ciudad renacentista de Cáceres, construida sobre el trazado medieval y árabe de la ciudad vieja y que hoy podemos disfrutar en un magnífico estado de conservación gracias en parte a que fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1986.
Ciudad Monumental de Cáceres

Su estratégica ubicación en lo alto de una loma que domina el llano cacereño la hicieron una fortaleza romana inexpugnable hasta la llegada de los visigodos que la arrasaron. Posteriormente estuvo dominada por los árabes que la dotaron de mezquitas, murallas y baños hasta que fue de nuevo conquistada por los cristianos.

 De aquellas épocas apenas quedan algunos restos romanos de muralla y en el Foro de los Balbos, alguna casa árabe y parte de la judería adosada a un lado de la muralla.  Dentro del recinto amurallado se hallan la concatedral de Santa María así como los palacios más bellos entre ellos el de las Veletas, los Golfines de Abajo, de Carvajal, de Toledo-Moctezuma y la casa de los Solís. Es lo que se conoce como la "Ciudad Monumental" plagada de torres como la de Bujaco, la de los Púlpitos, la de los Pozos o la de las Cigüeñas y de espectaculares iglesias como la de San Mateo.

Como curiosidad, deciros que por mandato de Isabel la Católica todas las torres defensivas de la ciudad fueron mandadas desmochar excepto la de la Cigüeñas, en represalia al apoyo mostrado por sus dueños a Juana la Beltraneja en la guerra que estas llevaron a cabo por la sucesión.

Acceso por el Arco de la Estrella


El acceso principal al recinto amurallado se realiza subiendo la escalinata que parte de la Plaza Mayor y atravesando el arco de la estrella, llamado así por el farol en forma de estrella que lo adorna y por la imagen de la Virgen de la Estrella que se aloja en la parte interna. En unos pocos pasos nos encontramos enfrente de la Catedral y de los Palacios más espectaculares de la ciudad. Las horas se van pasando deambulando una y otra vez por las estrechas calles flanqueadas por balcones escondidos y románticas torres cubiertas de hiedra.


Iglesia de San Francisco Javier

Sin duda, las mejores vistas se encuentran en los lugares más destacados como desde las torres de la iglesia de San Francisco Javier, desde el campanario de la Concatedral o desde lo alto de la Torre del Bujaco donde pasamos un buen rato viendo deambular a lugareños y turistas por la transitada Plaza Mayor, ya extramuros pero corazón de la ciudad, lugar de reunión y punto de encuentro de la sociedad actual.




Tapas de ibéricos




Además de la monumentalidad de sus edificios hay que decir que Cáceres tiene otro tesoro del que presumir y ese es su gastronomía. Como dice nuestro querido amigo Filustro: "habría que nombrar al cerdo patrimonio de la humanidad". Y no le falta razón. En tan solo un fin de semana hemos degustado una serie de exquisiteces culinarias todas ellas derivadas del cerdo que no sabría por donde empezar.
En Cáceres se come muy bien, ya sea a la carta, de menú o de tapas. Para empezar, las migas con chorizo y uvas o cualquiera de las chacinas del cerdo ibérico destacando el jamón, patés de ibéricos, morcilla patatera, salmorejo con virutas de jamón y como platos principales el cuchifrito o cochinillo ibérico, el solomillo, la carrillera, el secreto, la pluma o la panceta de cerdo son algunos de los platos que nos han preparado de un modo magistral en los distintos restaurantes y taperías.
Sin olvidar, los quesos (la torta del casar nos dejó sin palabras), el carpaccio de retinto con virutas de foie o las aceitunas negras en paté (todo un descubrimiento).

Plaza Mayor

Si a este empacho de arte y gastronomía le unís un excelente vino de la tierra y la mejor de las compañías el resultado es un fin de semana de cuento de hadas.
Gracias Filustro por este regalo de aniversario.

Susana



6 comentarios :

  1. Que buen regalo de aniversario, así es como se celebran las cosas, viajando y disfrutando.
    Me ha gustado mucho como has empezado tu relato, como si fuera un cuento
    Cáceres, es una monumental ciudad, tiene unas calles y rincones llenos de encanto, y unos edificios preciosos, y lo mejor, efectivamente, es perderse por sus calles y pasear viendo todo sus casco antiguo, la parte de alrededor de la calle Mayor es muy bonita.
    Me gustaría volver a Cáceres de nuevo y así poder estar en su parador, que aún no lo conozco. Me alegro de que lo pasarais tan bien.

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  2. Sin duda un lugar precioso, con un gran encanto, gente maravillosa y una gastronomía excelente. Cáceres merece un paseo en calma por su casco antiguo, cargado de historia, especialmente de noche. Poder ver iluminada esta ciudad, recorriendo sus calles estrechas, en silencio repletas de casas nobles y palacios perfectamente conservados, es una experiencia inolvidable.
    Me ha gustado mucho todo lo que nos cuentas de esta maravillosa ciudad monumental.

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  3. Buenos días !

    Tienes un premio en mi blog! El premio Dardos. Pasate a recogerlo!
    http://www.pinafili.com/2012/11/premio-dardos.html

    Feliz Viernes!

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  4. Extremadura nunca defrauda y Cáceres no iba a ser menos. Junto a Toledo quizás sea la ciudad monumental mas espectacular en España. Si a esto le unimos una gastronomía de primer orden con el cerdo ibérico como punta de lanza que más se puede pedir para pasar un fin de semana en este ciudad patrimonio. Pues la mejor compañía, gracias por compartir tu vida conmigo. Por favor a ver si se ponen de acuerdo las diferentes regiones que tienen cerdos ibéricos y se presenta una candidatura común para que al cerdo ibérico se le declare Patrimonio de la Humanidad. Por su arte, cultura, sus monumentos y por la fantástica gastronomía, cáceres siempre estará allí para visitarla una y otra vez.

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  5. Cáceres es impresionante y uno de los conjuntos mejor conservados de Europa, recorrer sus rincones te traslada a otra época. Pero no solo la capital, toda la provincia es preciosa. El parador se encuentra en un antiguo palacio, en el casco histórico, tuve la suerte de estar alojada en él y la verdad es que salí encantada. Opino lo mismo que Filustro que habría que nombrar al cerdo patrimonio de la humanidad.
    Me alegro mucho que pasaseis un buen fin de semana.

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  6. Precioso tu artículo Susana. Me ha gustado mucho el estilo de cuento con el que lo has comenzado. Tuve oportunidad de estar en Cáceres un fin de semana siendo niña y guardo recuerdos muy bonitos que me gustaría volver a resucitar. La verdad es que tenemos miles de rincones en España que recorrer y siempre descubrimos cosas preciosas y además qué bien se come!. Nos han hecho un repaso de platos que nos ha abierto el apetito. Fantástico regalo. Gracias por compartilo con nosotros.

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