Uno de los rincones más bonitos del Parque del Retiro de Madrid son los alrededores de El Palacio de Cristal. Situado a orillas de un pequeño estanque, fue construido en 1887 a instancias del Ministerio de Fomento por el arquitecto Ricardo Velázquez Bosco.
Su estructura es de metal, y está totalmente recubierto por planchas de cristal, de ahí su nombre.
 |
| Pórtico jónico |
Es el edificio más luminoso y elegante del parque y está construido casi en su totalidad en hierro y cristal. Destaca también la decoración de azulejos realizada por Daniel Zuloaga.
 |
| Detalle de la decoración de azulejos |
En principio se trataba de un invernadero-estufa que servía de pabellón para albergar una gran muestra de plantas exóticas traídas con motivo de la Exposición General de Filipinas, que aquel año se celebró en Madrid. Inaugurada el 30 de junio de 1887, la exposición filipina pretendía mostrar a los madrileños la exótica vida cotidiana de aquellas islas, que por entonces seguían siendo colonia española.
Para ello, se construyó en el Retiro un auténtico poblado indígena, e incluso se trajo desde la isla de Luzón a buena parte de una tribu de "igorrotes", a quienes los madrileños podían ver habitando en sus cabañas de troncos, o navegando con sus piraguas por el estanque del palacio. También se trajeron caimanes, una gran boa, y una completa muestra de su flora, que fue la que se expuso en el palacio.
Acabada la exposición el gobierno decidió conservar el palacio y ha llegado hasta nuestros días como el edificio más bello del Retiro. En la actualidad pertenece al Ministerio de Cultura, quien lo ha dedicado a sala de exposiciones temporales del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía.
A sus pies se encuentra un lago artificial (existe una escalera que se sumerge dentro de él), en el que se pueden encontrar varios ejemplares de ciprés de los pantanos, cuya principal característica es que parte de su tronco y de sus raíces están bajo el agua. El edificio está rodeado de castaños de indias y de todo el entorno natural del Retiro.
 |
| Estanque del Palacio |
En la actualidad el Palacio de Cristal además de albergar exposiciones culturales puede alquilarse para la celebración de eventos.
Es una buena propuesta para pasear en una mañana de domingo por la capital.
Susana
Es uno de esos lugares que no hay que perderse cuando se visita el parque del Retiro. Su inconfundible estructura de cristal y hierro lo hace original que junto con el lago que se encuentra al lado, es uno de los rincones con mayor encanto del parque. El lugar perfecto para descansar en las calurosas tardes de verano. Sabía que en su origen este palacio fue utilizado como invernadero de plantas exóticas, pero desconocía lo del poblado indígena.
ResponderEliminarMe encanto volver a este coqueto y pequeño palacio. Recuerdo ir de pequeño a esta parte del Retiro con mis padres, me parece un lugar romántico, con el pequeño estanque delante con ese chorro en el centro. Un remanso de paz en este gran parque. Me encantan los lugares diáfanos y limpios, este al ser de cristal y metal, me ha seducido siempre y poder volver allí ha sido un acierto. Gracias Susana por recordarme mi infancia y deleitarnos con la historia de esta pequeña joya madrileña.
ResponderEliminarSiempre me han gustado los invernaderos en los jardines, es la forma de mantener las plantas delicadas, si además es una construcción como esta, antigua de cristal y metal, tiene un peculiar encanto.
ResponderEliminarDebió ser curiosa la Exposición de Filipinas y ver navegar a los indígenas con sus piraguas por el estanque.
El Retiro es el parque más representativo de Madrid, tiene zonas tan agradables y bonitas como esta del Palacio de Cristal.
Recuerdo la primera vez que me llevaron mis padres al Retiro, me pareció un lugar precioso. Aunque todo el parque es una maravilla con hermosos rincones que recorrer, la zona del Palacio de Cristal es la que más me gusta, rodeado de árboles y con un precioso lago.
ResponderEliminar