lunes, 17 de febrero de 2014

Puente la Reina, donde todos los caminos a Santiago se hacen uno

Muy cerca de donde confluyen los dos ramales principales del Camino de Santiago encontramos la villa medieval de Puente la Reina. A la entrada de esta localidad una leyenda recibe al peregrino: "Y desde aquí todos los caminos a Santiago se hacen uno solo".


En Puente la Reina se debe visitar la iglesia del Crucifijo fundada por los caballeros templarios en el siglo XII, lo que ha originado numerosas leyendas. Nos llamará la atención un curioso Crucificado con forma de "Y" que da nombre al templo. No es extraño encontrar por aquí peregrinos con sus conchas y báculos, de habla y cultura distintas que recorren la Ruta Jacobea.


Después de visitar la iglesia, resulta imprescindible recorrer la calle Mayor con sus bellos caserones de piedra y aleros de madera. Sus bajos están ocupados por comercios, tiendas de recuerdos y algunos restaurantes donde los peregrinos sacian el apetito.

Calle Mayor


A medio camino de la calle ese encuentra la iglesia de Santiago de finales del siglo XII donde destaca una hermosa portada románica. En su interior se puede contemplar la famosa talla gótica conocida como Santiago el negro. Tal denominación se debe al estado en que se encontraba la escultura del apóstol cuando fue hallada en un rincón de la iglesia, cubierta de polvo y suciedad.

Portada románica de la iglesia de Santiago

Pero, sin duda, es el puente sobre el río Arga lo que más me sorprendió. Es una bella muestra del románico de seis arcos, uno de los lugares más emblemáticos del Camino de Santiago y el que da nombre a la población.


Mandado construir por la reina Doña Mayor, esposa de Sancho III, rey de Navarra. La tradición cuenta que en el siglo XI se levantó el puente junto a un pequeña aldea llamada Garés. Durante la Edad Media la pequeña aldea alcanzó gran esplendor debido al continuo trasiego de peregrinos que se reunían y marchaban hacía el sepulcro del apóstol. Este puente era lugar de paso obligado y fue tan provechoso para los peregrinos que pronto Garés paso a llamarse Puente la Reina.


Antiguamente existían dos torres. Hoy sólo se conserva una donde los peregrinos debían pagar una tasa de peaje por cruzar el puente. Tampoco queda en pie una hornacina con una virgen que hoy se encuentra en la cercana iglesia de San Pedro. Hay una bella leyenda relacionada con esta virgen. Según cuentan: un pajarillo limpiaba el rostro de la imagen, sacudiendo sobre ella sus alas mojadas previamente en el río Arga.


Hoy el puente es muy transitado a cualquier hora del día. Un incesante flujo de peregrinos pasan a diario por sus piedras dejando atrás la villa, camino de las torres de la catedral compostelana.



                                                                                                                                                           Rafa

4 comentarios :

  1. Precioso pueblo del Camino de Santiago nos muestras. Me ha encantado el puente, es una maravilla. Cada vez que aparece algo de Navarra en el blog, más ganas tengo de conocer esta fntástica región. Rafa, como siempre, un gran trabajo.

    ResponderEliminar
  2. Me gusta la frase “Y desde aquí todos los caminos a Santiago se hacen uno solo”.

    Preciosa la portada románica de la iglesia de Santiago y emblemático el puente que cruzan los peregrinos.
    Muy buenas las fotos, Rafa.

    ResponderEliminar
  3. Un pueblo precioso, sin duda. Imagino la cantidad de peregrinos que lo habrán cruzado camino de Santiago. Parece que está muy bien conservado y las fotos del puente son espectaculares. Buen trabajo.

    ResponderEliminar
  4. Una pueblo que merece la pena visitar , que bien se come , allí pudimos comer y delitarnos con unas tapa y pinchos .

    ResponderEliminar

"