El pintoresco y marinero pueblo de San Juan de Luz se hizo famoso en todo el mundo gracias a la celebración de una boda muy especial. Luis XIV (el rey Sol) contrajo matrimonio con una Infanta española, María Teresa de Austria. La ciudad se engalanó para la ocasión y recibió a tan ilustres invitados.
Iglesia de Saint Jean Baptiste |
La Iglesia de Saint Jean Baptiste fue testigo de la boda real el mes de junio de 1660. Su exterior no es nada destacable, es más bien austero. En cambio, su interior es toda una sorpresa por su originalidad. Lo que más llama la atención son las galerías de madera adosadas a ambos lados que unidas a una luz tenue le dan una sensación mágica.
También es destacable el precioso retablo barroco del siglo XVII que cubre su cabecera. Recorriendo su interior se observa un pequeño barco de madera que cuelga del techo. Fue un regalo de María Teresa de Austria a esta localidad francesa. Según se cuenta, en uno de sus viajes la embarcación de la infanta sufrió una fuerte tempestad frente a las costas de San Juan de Luz. Los marineros de esta ciudad salvaron a la infanta de una muerte segura y ésta les regaló el barco en agradecimiento a todos los pescadores.
Con la unión de Luis XIV y María Teresa de Austria se dio fin a un largo período de guerras entre España y Francia. Durante el tiempo que duraron los preparativos de la boda, el Rey Sol se alojó en una noble mansión que pertenecía a un rico armador y comerciante, Joannis de Lohobiague. Desde entonces se la conoce como la casa de Luis XIV. Se puede visitar y en su interior se puede contemplar numerosas pinturas, vajillas y muebles de la época. Como curiosidad, esta casa ha pertenecido desde su construcción a la misma familia del armador.
Casa de Luis XIV |
Muy cerca nos encontramos con la Mansión del Infante, bello edificio de estilo renacentista que tuvo el honor de acoger a la Infanta María Teresa durante el enlace matrimonial. En la primera planta se encuentra el llamado "cuarto de la Infanta" y unas salas donde se puede admirar las vigas ricamente decoradas y una chimenea renacentista. El resto del edificio se utiliza para exposiciones temporales.
Mansión del Infante |
San Juan de Luz es uno de esos lugares donde se respira historia. Un bonito rincón situado a pocos kilómetros de la frontera española que merece la pena conocer.
Loli
Me gustan mucho estos posts que, además de enseñarnos un lugar especial por su belleza o encanto, nos cuentan un pedacito de historia. Son muy amenos e interesantes. Áunque la monarquía nunca ha estado exenta de detractores resulta chocante ver cómo en el siglo XVII las infantas se dedicaban a otros menesteres. Gran trabajo, Loli.
ResponderEliminarPreciosa e histórica iglesia. Muy curiosas y originales las galerías de madera del interior. Veo que esta boda real marcó el devenir de este pueblo francés. Buen trabajo Loli.
ResponderEliminarLoli, me encantan estos artículos tuyos donde nos cuentas hechos históricos y nos hablas de infantas y reyes, se nota que te gustan los libros de este tipo.
ResponderEliminarMuy original esta iglesia con las galerías de madera. Interesante pueblo.