jueves, 24 de septiembre de 2015

Los Reales Alcázares de Sevilla

Escondido detrás de unas murallas almohades del siglo XII, en pleno centro de Sevilla, se encuentra un bello conjunto de edificios palaciegos que, junto con la Catedral Gótica más grande del mundo y al Archivo de Indias con su incalculable número de documentos relativos al descubrimiento de América, forman parte del valioso patrimonio arquitectónico de esta maravillosa ciudad, declarada Patrimonio de la Humanidad.

Puerta del León, lugar de acceso para visitar el Alcázar

La visita a Los Reales Alcázares hay que iniciarla por su entrada principal, la Puerta del León. Debéis tomaros un tiempo para visitar el Alcázar, recorrer todo su interior y entrar en todas sus dependencias. No dejéis ninguna sin visitar, os aseguro que quedaréis sorprendidos con todo lo que veréis. Hallaréis construcciones de muy diversos estilos arquitectónicos que fueron añadidas por los diferentes soberanos musulmanes y cristianos.


Patio de la Montería y Palacio Mudéjar 

De las pocas construcciones originales de la época almohade tan sólo han llegado hasta nuestros días el bello recinto amurallado con sus carcomidos muros, alguna torre y el llamado patio del Yeso con sus arcos de herradura y alberca en el centro. Además de alguna sala que formaba parte del primitivo palacio donde se reunía el consejo de visires. El resto de edificaciones acabaron destruidas por el paso del tiempo, los terremotos, algún que otro incendio o remodeladas por los reyes cristianos.

Patio del Yeso, la parte más antigua de los Alcázares


No tardaréis en descubrir una de las partes más espectaculares del Alcázar, el Palacio Mudéjar o del rey don Pedro I (quien se ganó el sobrenombre de "el Cruel"). Para visitarlo deberemos atravesar el Patio de la Montería, del que dicen era el lugar donde el rey concentraba a sus monteros antes de salir de cacería. En su interior un vestíbulo da paso a dos partes bien diferenciadas, una para la vida oficial y otra para la privada.

Patio de la Montería

Palacio Mudéjar o del rey don Pedro I, el Cruel

Una vez dentro debemos elegir entre tanta monumentalidad y tantas estancias. Da igual ir a un lado u otro, todo esta comunicado entre si. Así que no nos queda nada más que disfrutar de esta maravilla.
Admirar su famoso Patio de las Doncellas, rodeado de arquerías polilobuladas delicadamente trabajadas, obra maestra del arte mudéjar en Andalucia.

Patio de las Doncellas


Asombraos con El Salón de Embajadores, una de las salas más bellas del Alcázar o con el salón del techo de Carlos V que debe su nombre al magnífico artesonado renacentista donde se aprecia los retratos del Emperador y de Isabel de Portugal.


Sin abandonar el palacio contemplad la exquisita elegancia del Patio de las Muñecas cuyas columnas y capiteles se remontan a la época de los califas de Córdoba (dicen que provienen del palacio de Medina Azahara). Recorrer las suntuosas salas decoradas con hermosos azulejos, ricos artesonados, preciosas yeserías y columnas de mármol. No hace falta decir que arquitectónicamente todo el conjunto resulta impresionante.




El Palacio Mudéjar fue mandado edificar a mediados del siglo XIV y a pesar de su aspecto, debemos saber que se trata de un palacio cristiano de estilo mudéjar, un arte puramente hispano fruto de la composición entre elementos musulmanes y cristianos en cuya construcción el rey Pedro I mandó llamar a los mejores artesanos provenientes de Granada, Toledo o de la propia Sevilla.

Patio de Las muñecas
Pasaremos ahora al Palacio Gótico, muy reformado con gustos barrocos donde disfrutaremos de la sala de las bóvedas, en ella se celebraron los banquetes de la boda real del rey Carlos I. Veremos la sala de tapices, decorada con grandes telas de origen flamenco que representan la conquista de Túnez.

 Palacio gótico de Alfonso X y sala de tapices


Baños de Doña María Padilla
Una vez recorrido el palacio, salgamos a los jardines que rodean los Alcázares. Así que olvidaos de las prisas, daos un agradable paseo entre su exuberante vegetación donde abundan los naranjos y palmeras. Enseguida os daréis cuenta de que es un lugar que invita a sentarse en algún rincón donde relajarse y asimilar la grandiosidad de todo cuanto hemos visto.

Jardines del Alcázar

 Un espacio verde donde descansar



Si aún no conocéis los Reales Alcázares de Sevilla, creo que ya va siendo hora de descubrirlos, además podría convertirse en el destino perfecto para una escapada de fin de semana.

                                                                                                                                                           Rafa

5 comentarios :

  1. hermosa arquitectura, maravilloso lugar ... muchas historia allí

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  2. Tienes razón, Rafa, todo el conjunto es impresionante.
    Personalmente me gusta de manera especial el Patio de Las Doncellas. Los Jardines del Alcázar tienen una luz especial y pasear por ellos es un auténtico placer.
    Sólo por visitar los Reales Alcázares de Sevilla ya merece viajar a esta ciudad, que además tiene otros grandes atractivos, un animado ambiente y una gente acogedora.

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  3. Es un palacio precioso que no debe de dejar de visitarse en Sevilla. Situado en pleno centro a pocos pasos de la catedral y en pleno barrio de Santa Cruz, es una obra maestra. Tanto si te gusta el arte mudéjar como si no, no podrás dejar de admirar la decoración de los patios, los techos y los famoso jardines. Además el pasado año fue elegido para rodar algunas escenas de la famosa serie "Juego de Tronos". Una propuesta imprescindible.

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  4. Uno de los mejores alcázares que se puede ver en España.Su interior es digno de ser visitado, esta lleno de curiosidades y de piezas de arte de no dejan a nadie indiferente. Un lugar para disfrutar con calma y admirar todos los pequeños detalles que pasarían desapercibidos. Sus jardines son espectaculares

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  5. Irse de #Sevilla sin visitar Los Reales Alcázares es imperdonable. Te quedas anonadado ante tanta belleza y para rematar unos jardines de ensueño. Me encanta la variedad de estilos arquitectónicos que posee. Lo mejor es tomarse la visita con la mayor tranquilidad posible y disfrutar. Gran reportaje Rafa.

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