jueves, 6 de febrero de 2014

La Dolce Vita

Roma es, a mi parecer, la ciudad más bonita del planeta.
Hay que tener en cuenta la fecha de su fundación y el estado de conservación en el que se encuentran sus monumentos para percatarse de que nos contemplan más de 2000 años de historia.

Pero, más allá de sus espectaculares monumentos y su historia Roma es, ante todo, una ciudad cosmopolita en el sentido más estricto de la palabra ya que es un crisol de gentes: estudiantes, turistas, fotógrafos, periodistas y católicos de todas partes del mundo.

Puesto callejero de flores


Se puede tomar el pulso a la ciudad con un simple paseo por sus calles y plazas. A cualquier hora del día encuentras a mujeres comprando en los mercados y puestos callejeros, a chavales jugando a la pelota en cualquiera de sus plazas, la pareja que deja un candado como símbolo de su amor en un puente del Tíber, los turistas que no dejan de pasear por el Foro armados con sus cámaras, pintores intentando capturar la imagen perfecta en sus lienzos, los amigos que charlan animadamente en un café o discuten por el fútbol...

Existen miles de rincones encantadores por los que pasear y que quedan fuera de los circuitos habituales de guías y excursiones. Merece la pena descubrirlos por uno mismo como los alrededores del Teatro Marcelo, el parque de Villa Borghese, los alrededores de la Piazza del Popolo... Esta último lugar en uno de los epicentros de la ciudad. Siempre hay algún espectáculo que ver o simplemente los jóvenes quedan allí para tomar un "gelatto" en sus famosas heladerías.

Piazza del Popolo

Ristorante
Uno de los barrios por los que el viajero podría fácilmente perderse en Roma es el Trastevere, llamado así por encontrarse al otro lado del río Tíber. Es un pequeño laberinto de callejuelas que desembocan en placitas llenas de niños jugando al balón, balcones con ropa tendida, gatos y tiendas de anticuarios. Por la noche no hay nada mejor que sentarse en alguna trattoría con tu pareja y cenar un plato de pasta escuchando de fondo la música del violín de algún artista callejero.

Otra parada obligada es La Fontana di Trevi. A pesar de tratarse de uno de los lugares más visitados de la ciudad desprende un encanto y una atracción hacia el visitante que no deja indiferente. Teniendo en cuenta el reducido tamaño de la plaza y las dimensiones de la fuente, para poder admirar la fontana como es debido conviene visitarla también de noche ya despojada de los numerosos turistas y con un matiz diferente debido a la iluminación artificial como en la película La Dolce Vita, escenario del sensual baño protagonizado por Anita Ekberg. Los visitantes siguiendo la tradición no se bañan en la fuente como la protagonista (más que nada porque está prohibido y la multa puede ser de aúpa) sino que lanzan monedas al agua. Una moneda, para volver a Roma, 2 monedas para enamorarse de un romano y 3 monedas para quedarse. Periódicamente se recogen las monedas de la fuente y se donan a la Cruz Roja (un bonito gesto). Está previsto que la Fontana sea restaurada gracias al mecenazgo de la firma de moda italiana Fendi. Esta marca será la encargada de pagar las tareas de restauración de la Fontana di Trevi que hace 2 años sufrió el desprendimiento de varios fragmentos de un tamaño considerable

Fontana di Trevi

Así que ya saben, si desean volver a Roma, lancen una moneda de espaldas a la Fontana di Trevi (de día o de noche), gesto que les asegurará el regreso aunque la ciudad eterna ya les habrá hechizado para siempre.

Susana

4 comentarios :

  1. Roma es una ciudad que me gusta mucho. Siempre he pensado que el siguiente país para conocer, después del nuestro, es Italia, por la facilidad de planificar el viaje y por el parecido con nuestras costumbres, además de contar con ciudades y pueblos preciosos.

    Es cierto que Roma tiene mucho para visitar y disfrutar, por eso todo el que va quiere volver alguna otra vez. Per piacere. Chao!! Susana.

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  2. Roma es un enorme museo al aire libre que se necesitas su tiempo para conocerla como cualquier ciudad de Italia . Tengo muchas ganas de visitarla y recorrer sus calles sus plazas .
    Un bonito artículo Susana .

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  3. Es imposible no enamorarse de Roma. La ciudad que cautiva por su historia y su arte.
    Muy buenos consejos. Tomo nota de todo para cuando llegue el momento de visitar la ciudad eterna.

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  4. Roma es espectacular, una auténtico joya. Pasear por sus calles y plazas es una maravilla. Visitarla es algo que hay que hacer si o si. Su aire cosmopolita te atrapa enseguida y te invita a conocer más y más lugares. No puedes parar es adictiva, no tiene fin. Lo ideal sería estar una semana allí y empaparte de sus más de 2000 años de historia. Prometo volver y conocer todo lo que nos faltó por visitar. En tres días te quedas corto. Susana has reflejado muy bien las sensaciones que la Ciudad Eterna provoca. Buen trabajo.

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