lunes, 31 de octubre de 2016

Josefov, el barrio judío de Praga

Sinagoga Staronová

Praga, la ciudad donde el tiempo parece haberse detenido y que gusta pasear despacio, para detenernos en cada rincón, levantar la mirada y descubrir la belleza de sus edificios. Después de visitar los barrios más representativos de la ciudad, nos acercaremos a otro de sus barrios no menos importantes, el barrio judío.



Ayuntamiento del barrio judío

Uno de los nuevos estilos arquitectónicos utilizados en la reconstrucción del barrio judío

Hoy en día pocos son los vestigios que quedan de los años de esplendor la comunidad judía de Praga. Tan sólo se conservan seis de sus sinagogas, el Ayuntamiento y el Antiguo Cementerio Judío. El resto, sus murallas, calles y edificios, fueron demolidos entre el siglo XIX y XX para darle el aspecto que tiene en la actualidad, con majestuosos y señoriales edificios.

 Sinagoga alta o sala de ceremonias, de estilo neorrománico

El barrio judío lleva el nombre de Josefov en honor al emperador José II, quien mejoró las condiciones de la población judía y acabó con las discriminaciones a las que estaban siendo estos sometidos. El barrio se había convertido en un gueto donde la falta de espacio y la insalubridad eran el medio ideal para la propagación de enfermedades y epidemias. Incluso no se quiso ceder nuevas tierras para construir un nuevo cementerio, de manera que para aprovechar el poco espacio del que disponían, se cubrían las lápidas más antiguas y se volvía a enterrar nuevos cuerpos encima.

 Las lápidas se apiñan en el antiguo cementerio

De las sinagogas que se conservan en este barrio destacaría la Vieja-Nueva, conocida como sinagoga Staronová, es del siglo XIII y está considerada la más antigua de Europa, además de ser uno de los primeros edificios góticos de Praga. En la actualidad sigue siendo lugar de culto de la comunidad Judía y para visitarla, los hombres tienen que llevar la cabeza cubierta, por respeto.

Interior de la Sinagoga Vieja-Nueva o Staronová


En el interior de la sinagoga, un anciano voluntario me contó, además de los detalles del edificio, la leyenda del Golem. Una extraña criatura de barro que cobraba vida introduciéndole en la boca un pergamino y unas palabras secretas que el rabino Löw, sólo conocía. Un buen día durante el sabat, día de descanso para los judíos, al rabino se le olvidó introducir en la boca el pergamino y el Golem enfureció, destrozando todo lo que encontraba a su paso. Pasado el sabat, el rabino Löw que era el hombre más sabio de todo el barrio Judío, depositó la figura de barro en el desván de la Sinagoga Vieja-Nueva donde terminó convertida en polvo y dicen que allí sigue todavía.

Imagen del Golem

El resto de sinagogas están repartidas por el barrio judío y en ellas encontrareis diferentes exposiciones con valiosas colecciones donde se guardan manuscritos, fotografías y grabados sobre la historia de la comunidad judía.

Interior de la Sinagoga Española

Sinagoga Maisel

Interior de la Sinagoga Pinkas

Entrar en el cementerio del barrio judío es de lo más sobrecogedor. Dicen de él que es único en Europa y se calcula que puede haber enterradas más de 100.000 personas. En este lugar se apiñan millares de lápidas desordenadas por la falta de espacio, los cuerpos debían ser enterrados unos encima de otros, así hasta llegar a apilar doce niveles. Este cementerio ha estado activo hasta finales del siglo XVIII.




                                                                                                                                                            Loli

3 comentarios :

  1. Josefov es uno de los barrios más interesantes de Praga.
    Hay una entrada conjunta para visitar todas las sinagogas y el cementerio. Es muy impactante ver en la Sinagoga Pinkas todas sus paredes cubiertas con los nombres de los judíos que mataron los nazis.
    La Sinagoga Española, llamada así por su decoración, es muy bonita.
    Pero donde estuve mucho más tiempo fue en el Cementerio Judío, realmente sobrecogedor. El sol que se filtraba por las ramas de los árboles le daba al sitio un aspecto irreal. Una visita imprescindible en Praga, conmovedor, imponente, personalmente uno de los lugares que más me sorprendió

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  2. Todo el barrio judío merece una visita, tiene mucho que ofrecer y es una zona muy agradable. Además resulta curioso ver como en su día fue un gueto y ahora se ha convertido en un barrio de lo más distinguidos de Praga. Recorrer su antiguo cementerio a través del laberinto de tumbas apiladas y en silencio, es realmente estremecedor e inquietante. Un lugar que se ha convertido en visita imprescindible.

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  3. Me ha resultado una zona muy interesante dentro del bullicio de turistas de Praga. Es extraño ver cómo cambian de perspectiva algunos barrios con el paso del tiempo; de gueto a barrio distinguido. Lo que más me ha gustado es el cementerio y, cómo no, la leyenda del golem. Interesante artículo de esta ciudad tan apasionante!!

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