jueves, 5 de septiembre de 2013

Monasterio de Santa María la Real de las Huelgas, Burgos

En Burgos, próximo a las orillas del río Arlanzón, existía una zona de ricos prados donde los habitantes de esta antigua ciudad llevaban sus ganados a un lugar que era conocido como "Las Huelgas". Atraídos por la tranquilidad del lugar, a finales del siglo XII, el rey Alfonso VIII a petición de su esposa Leonor de Plantagenet, levantaron en la zona el monasterio de Santa María la Real de las Huelgas, de religiosas cistercienses, de rigurosa clausura para que sirviera como panteón real y de nobles, al que los monarcas acudían para descansar (de ahí su nombre de huelgas, que quiere decir holganza o descanso).


El monasterio gozó de especial protección y grandes privilegios como era lógico dado sus orígenes. Las dos primeras abadesas fueron de sangre real, como la infanta María Sol de la casa real aragonesa y la infanta Constanza, hija de los reyes fundadores.
Deseaba conocer tan importante monasterio desde hacía mucho tiempo y la primera impresión que me dio es que es uno de esos lugares que por sí solos llaman la atención, un lugar que encierra entre sus muros historias interesantes.


Visitaremos su interior a través de una visita guiada y como en tantos monumentos de nuestro país, no se pueden hacer fotografías en el interior.
Lo primero que nos enseñan es la Iglesia a la que accedemos a través de una bonita portada. Recorremos las naves laterales donde se encuentra el panteón real con numerosos sepulcros. Aquí están enterrados: Enrique I de Castilla, hijo de los reyes fundadores y don Fernando de la Cerda, hijo de Alfonso X el Sabio. En la nave central los sepulcros de Alfonso VIII y Leonor de Plantagenet, con las armas de Castilla y los tres leones del escudo inglés de la reina. También encontramos los sepulcros de doña Constanza, hija de los reyes fundadores y segunda abadesa del monasterio. Mientras contemplamos todo con verdadero interés, la guía nos explicaba las reformas que se hicieron en la Iglesia, tapando con un muro los arcos de acceso a la nave para salvaguardar la clausura de las monjas cistercienses. Durante la Guerra de la Independencia, las tropas francesas saquearon todo el monasterio profanando muchas de las tumbas. Este monasterio mantuvo todos los privilegios con los que contaba hasta el siglo XIX que fueron suprimidos por orden del Papa.


Visitaremos la Sala Capitular y los dos claustros, el de San Fernando y el de las Claustrillas, de finales del románico. Después nos conducen a la capilla de Santiago donde una curiosa talla de madera articulada del santo era utilizada para armar caballeros a los reyes de Castilla, ya que sólo Dios o el propio Santiago podían hacerlo.
Ya para terminar, el almacén destinado en la actualidad a Museo de Telas, en el cual se muestran algunos de los tejidos que quedaron en los sarcófagos después del saqueo, así como el Pendón de la Batalla de las Navas de Tolosa que supuestamente fue la sobrecubierta de la tienda de campaña del jefe musulmán.



Destacan además las piezas halladas en la tumba de Fernando de la Cerda, única que se salvó de la profanación. Me sorprendió la riquísima indumentaria con que fue enterrado y lo bien conservado que se encontraba todo.
En la actualidad el monasterio sigue gobernado por monjas cistercienses que dedican su vida a la oración y a atender a mujeres que soliciten un retiro espiritual.


                                                                                                                                                                 Loli

6 comentarios :

  1. Muy bonito Monasterio,se merece una visita.Un saludo.

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  2. Me gustan mucho este tipo de monasterios. El de las Huelgas está perfectamente conservado y su visita es muy interesante. Tres veces nos costó ir a Burgos hasta que conseguimos poder entrar, siempre llegábamos cuando ya estaba cerrado.
    Muy bien contada la historia del lugar y estupendamente explicado lo que allí se puede ver, me ha encantado leerlo, Loli.

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  3. Con este monasterio tengo una espinita clavada. He querido visitarlo en muchas ocasiones pero por "h" o por "b", nunca he podido verlo por dentro, pero con tus indicaciones Loli, me hago una idea bastante clara de la belleza de este lugar. Muy buen trabajo, una gran guía para conocer este monumento. No prometeré verlo en breve porque siempre se me chafa el plan, pero se se me ha abierto el apetito al leer este artículo.

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  4. No sabes la de veces que nos hemos propuesto ir pero siempre surge algo. Una de las veces era lunes llegamos a la puerta y estaba cerrado, era el día de descanso y nos dio muchísima rabia. ¡Qué se le va a hacer! Gracias a tu post me hago una idea de lo que me perdí. En otra ocasión será.... Un gran artículo lleno de pinceladas históricas, Loli.

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  5. El monasterio es impresionante, con una visita guiada muy amena. Igual de interesante ver las tumbas de infantes y reyes o el Museo de Telas donde se conservan ropas y joyas en perfecto estado.
    Una visita muy interesante e imprescindible en Burgos.

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