En la margen derecha del río Henares a su paso por Alcalá y próximo al arroyo Camarmilla se encuentran los restos de la gran ciudad romana de Complutum que hoy en día da nombre a los habitantes de Alcalá de Henares. La expansión inmobiliaria de los años 70 hacia el oeste del núcleo urbano destruyó gran parte de la ciudad romana que en la actualidad se encuentra bajo los edificios del barrio del Juncal. Tal y como nos constató uno de los trabajadores del parque arqueológico, muchos mosaicos se encuentran en los patios de los bloques de pisos o bien se utilizaron como mortero para sus cimientos. Sin embargo, muchos otros de los mosaicos que se han encontrado en las casas de la ciudad se pueden contemplar en el Museo Arqueológico Regional situado en el centro de la actual Alcalá de Henares.
Afortunadamente, en pleno siglo XXI, el yacimiento arqueológico al aire libre se encuentra en pleno proceso de excavación y, aunque con lentitud, poco a poco va dejando ver sus tesoros ocultos. Sus responsables decidieron abrir las puertas del recinto en junio del 2012 y permitir el recorrido de gran parte del centro de esta ciudad romana del siglo I d.C. que abarca la zona conocida como Regio II incluyendo los restos del decumano III, el foro, la curia, las termas, el mercado, la basílica, la casa de los augures (auguraculum) y próximamente se abrirá al público la visita a la magnífica Casa de los Grifos, una gran domus con peristilo del año 50 - 60 d.C. cuyos muros, según nos indicaron, se han encontrado en bastante buen estado de conservación con delicadas pinturas y se están restaurando para ser contemplados en su lugar original. El edificio se ha cubierto para preservar sus tesoros y permanece cerrado a la visita por el momento. Aún queda una sala por excavar en la que se cree se encontrarán los aposentos de los dueños de la casa que debían ser notables por la ubicación de la domus y la decoración de la misma, incluso pertenecientes a la clase alta dominante del Imperio.
La ciudad romana de Complutum abarca un periodo que va desde los años 20 del siglo I d.C. hasta su total abandono por motivos que desconocemos a finales del siglo VI fecha en la que la ciudad se trasladó a los alrededores de la actual Catedral Magistral y creció en ese entorno tras la llegada de los musulmanes en el siglo VII. Sin embargo, es un extenso periodo de tiempo en el que Complutum sufrió una serie de mejoras y reformas en sus principales edificios y en el que además se construyó un colegio llamado hoy "Casa de Hippolytus" donde los jóvenes romanos acomodados asistían para recibir en un ambiente lúdico y religioso la instrucción necesaria para desempeñar cargos municipales. Este es un indicador de la importancia de Complutum en la Hispania romana, estratégicamente situada en un cruce de caminos de las principales ciudades romanas de la Península Ibérica y que llegó a alcanzar unas 55 hectáreas, un tamaño bastante considerable para la época. Los principales edificios públicos son del siglo I d.C. pero en el siglo III la ciudad sufrió una serie de cambios y mejoras en sus construcciones más notables que dejan entrever su desarrollo urbano y crecimiento.
La Casa de Hippolytus puede visitarse también pues se encuentra a unos 500 metros de Complutum con una entrada combinada. Este colegio disponía de termas con su correspondiente calefacción llamada hipocausto, un atrio techado con unas altas cristaleras adornado con un mosaico muy curioso de tema marino en el que se distinguen multitud de especies como la langosta, el calamar, la gamba o el delfín y un espléndido jardín donde se daban clases y discursos y que estaba formado de especies vegetales y animales muy exóticas de procedencia oriental como pelícanos, palmitos, tilos y cedros. Se han hallado también los restos de una sala dedicada al culto de Diana, la diosa de la caza, y fragmentos de un estatua en lo alto de una columna dedicada a esta divinidad en la que se aprecian los pies de la diosa y un perro.
Volviendo a Complutum, se está terminando de construir en las cercanías del parque un edificio que albergará los restos de vasijas, enseres y esculturas que se hallen en el yacimiento y que se abrirá al público próximamente. El paseo por las ruinas de Complutum nos deja una sensación agridulce; de satisfacción, por un lado, al contemplar los adelantos y servicios de los que disponía la ciudad pero, por otro, de desazón por los tesoros perdidos bajo las nuevas construcciones.
Como curiosidad indicar que en el yacimiento se encontraba una ermita abandonada que hubo de ser derruida en cuyo interior se encontraba un muro perteneciente al edificio de la Curia y que se conoce como el Paredón del Milagro, por creerse que fue el lugar donde sufrieron el martirio los Santos Niños, Justo y Pastor, patrones de la ciudad complutense.
Por otra parte queda mucho por excavar en esta ciudad romana que, a juzgar por su relevancia debía albergar un teatro en sus alrededores. Se cree que al otro lado del río Henares, en la ladera del cerro de San Juan del Viso, podrían hallarse las ruinas del teatro de Complutum. Los restos de una vía que partía desde la puerta de la ciudad hacia ese camino y las ruinas de un puente de piedra en el lecho del río, parecen indicar que sí existió.
Aún así se puede deambular por la ciudad de Complutum tratando de imaginar qué más hay debajo de tantas toneladas de tierra tras 20 siglos de historia. Lo que sí sabemos es que por encima de los hallazgos romanos se han encontrado algunos restos visigodos que podrían cambiar la historia antigua en la que se creía que los visigodos no habitaron estas tierras. Habremos de esperar para saber hasta qué punto conocemos nuestra historia.
Para completar la visita por la Alcalá romana recomiendo pasar la tarde en el Museo Arqueológico Regional donde encontrareis gran parte de los mosaicos extraídos de la ciudad e información adicional de la vida en Alcalá de Henares y la Comunidad de Madrid en todos los periodos de la historia.
Sin duda, aún queda mucho por descubrir.
Susana
Parece mentira que, parte de unos restos arqueológicos de valor incalculable se pierdan, sepultados o destruidos al crear una ciudad nueva.
ResponderEliminarSusana, nos has dado una clase magistral de Historia. La próxima vez que vaya a Alcalá de Henares, me pasearé por la ciudad de Complutum y visitaré el Museo Arqueológico Regional, siempre me han gustado los mosaicos, me parece un delicado y laborioso trabajo.
Excelente artículo del pasado romano de Alcalá de Henares, hasta ahora poco conocido. Queda mucho por excavar e investigar, pero todo se andará, En estos tiempos de crisis todo se ralentiza, pero por lo que ví, la gente que trabaja allí esta entusiasmada con lo que puede aparecer si se continua excavando. Los mosaicos tanto de Complutum como de la Casa de Hippolytus son excepcionales. Tenemos que apoyar entre todos que estos restos romanos no se queden en el olvido y se incluyan en las visitas de Alcalá de Henares. Siempre que visito restos romanos me imagino como sería la vida en esa época y todo lo que aportaron a la humanidad.
ResponderEliminarComo diría Obelix estos romanos están locos. Enhorabuena por esta lección profesora Susana, se nota que te encanta esta época de la historia y lo transmites estupendamente.
Muy bien contada y detallada la historia de esta ciudad romana que fue Complutum. Hace algunos años en una visita a Alcalá de Henares, intente ver este yacimiento pero se encontraba cerrado al público. Pero visite La Casa de Hippolytus y el Museo de Arqueología Regional. He de decir que me resulto muy interesante las dos visitas, sobre todo la del Museo ubicado en un precioso convento antiguo. El museo tiene muestras de arqueología, fósiles, herramientas del Neolítico y también de la Edad de Bronce pero lo más maravilloso son los mosaicos romanos rescatados de la antigua Complutum.
ResponderEliminarQué lugar más interesante, me ha encantado y como siempre perfectamente detallado. Que lástima que no se pueda admirar toda la grandeza de estas ruinas llenas de historia, pero afortunadamente gran parte de los mosaicos extraídos en las excavaciones se pueden disfrutar en el Museo Arqueológico. Una visita imprescindible, cuando se visita Alcalá de Henares.
ResponderEliminar